Una Empresa de los Amigos
Apenas asumido Mauricio Macri como presidente de la Nación, un grupo de empresarios allegados a Cambiemos alquiló un avión en Israel. Ese es todo el capital empresario. Y una vez arrendada la vieja aeronave, el gobierno nacional le «regaló» el aeropuerto de El Palomar para convertirlos en la primera aerolínea de modalidad «low cost» en Argentina. Para ello, el gobierno nacional contó con la colaboración del intendente de Morón Ramiro Tagliaferro. Hizo en tiempo récord todos los trámites administrativos, incluso convenió con el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para que agentes de tránsito porteños vengan a reorientar el sentido de circulación de las calles que rodean al «aeropuerto trucho».
La audiencia pública para debatir la probabilidad del aeropuerto fue ocupada por las patotas a cargo del ex concejal de Juan Carlos Rousselot, Oscar Alvarez, que le pegaron al concejal de Unidad Ciudadana Hernán Sabbatella. Y ahora introdujeron un expediente para que, con la mayoría automática del oficialismo y el voto doble de la presidenta Analía Zapulla, se cambie el sentido de las calles que rodean el aeropuerto. Es decir, mientras el macrismo insiste con el experimento empresarial de su empresa amiga, la justicia advierte sobre «males mayores» y pide la suspensión de todos los vuelos.