Es que la funcionaria en cuestión ejerció el mismo cargo en Moreno hasta el 31 de julio, por lo cual es una de las responsables políticas de la explosión que provocó la muerte de Calamano y Rodríguez, y que por cuestión de minutos no se convirtió en un magnicidio, ya que los alumnos (casi 500) y el resto del equipo docente aún no había ingresado al siniestrado establecimiento.
«Siempre nos quejamos del Olor a Gas…»
«Soy Nancy. La escuela que estalló es mi escuela. Mi oficina en particular donde trabajamos 5 personas… Yo estaba en la puerta. Me retuvo una compañera… Quería adelantarme, como llegué más temprano, me iba a adelantar a hacerle el desayuno a mis compañeras…»; dijo en un audio de whatsapp la consternada compañera de Calamano y Rodríguez. Y relató: «Siempre nos quejamos del olor a gas. No hay garrafas ahí… Lo que estalló fue la cañería mal hecha. Justamente mi (vice)directora Sandra estuvo ayer (por el miércoles 1 de agosto) hasta las 7 de la tarde; porque hizo los miles de reclamos que viene haciendo… Y ayer vinieron, como siempre vienen, miran y se van… nunca traen y nunca resuelven…»
«Estaba Amenazada por la Inspectora…»
Párrafo seguido, la consternada sobreviviente reflexionó: «Lo que hacía mal, tal vez ella es no suspender las clases, pero siempre estaba amenazada por la inspectora: «que eso no se debía, que iba a ser sancionada»…» Y más adelante sentenció: «Con olor a gas nos hacen trabajar igual. Los chicos se pueden ir a las 12, nosotros no.»