(Moreno, 12/09) En el marco de las medidas de fuerza que la comunidad educativa morenense viene llevando a cabo desde la explosión del EP 49 que terminara con la vida de Sandra Calamano y Rubén Rodríguez, la comunidad educativa de esa localidad en general y de la CEC 801 en particular viene recibiendo reiteradas amenazas con el objetivo de desalentar las ollas populares que se vienen llevando a cabo en el distrito.
Las tétricas intimidaciones llegaron a declamar expresiones como: «La próxima olla es en Güemes y Roldán», en alusión a la dirección donde funciona el cementerio municipal.
Pero este miércoles las amenazas se convirtieron en realidad al ser secuestrada y torturada la docente Corina De Bonis del CEC 801 que según expresaron sus consternados conpañeras «es una de las que más cocino para los chicos del barrio».
Según los testimonios, De Bonis fue «levantada en un auto» donde le marcaron el abdomen con un punzón escribiéndole «ollas no».
La trabajadora de la educación fue liberada y radicó la denuncia en la sede policial de La Reja.
Con esta intimidación física, los torturadores de De Bonis lograron parcialmente su cometido; ya que para este jueves 13 se suspenden todas las actividades del CEC 801, incluida la olla popular.