Un Curriculum con Algunas Omisiones.
«¿Cómo implementar una red de medicina fetal para mejorar la salud materno infantil? Enfoque multidisciplinario dirigido a los profesionales de la salud y a la comunidad?», reza la invitación al coloquio; y agrega a la presentación del disertante algunos de sus lauros: «Profesor Titular Consulto de Obstetricia de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires; Integrante de la Comisión de Salud Perinatal del Vaticano; Director de la Red Argentina de Docencia e Investigación (READI); Director Médico de Diagnomed S.A.» La seductora presentación omite – quizá inocentemente – que Palermo (formado en el Hospital Nacional Profesor Alejandro Posadas durante la década del ´70) formó parte de la primera dirección macrista del Hospital Posadas desde enero de 2016 con Alberto Díaz Legaspe en el cargo de director ejecutivo nacional de ese nosocomio, y también durante la dirección de su sucesor Carlos Di Pietrantonio.
El Director «Bueno».
Palermo y Di Pietrantonio en una Reunión de Trabajo en el Posadas. |
Como director de asistencia médica, Mario Palermo, ofició de «policía bueno» durante la tanda de despidos más numerosa que tuvo el nosocomio palomarense en marzo de 2016. Palermo era el encargado de reunirse con los jefes médicos para explicarles lo inexplicable. Argumentaba desconocer las resoluciones tomada por Díaz Legaspe, y les aseguraba a los profesionales de la salud que – debidamente documentada la dedicación e idoneidad del personal desafectado – se lo reincorporaría inmediatamente. Claro que eso nunca ocurrió y (salvo algunos contados casos de agentes con discapacidad o en período de gestación) ninguno de los primeros 641 despedidos del Posadas fueron reincorporados: en un contexto de epidemia de dengue y chikungunya que no se vivía en nuestro país desde el año 2009, había comenzado el vaciamiento del único hospital nacional de la Argentina, referencia en cuestiones de epidemiología y detección de este tipo de patologías en todo el cono sur de americano.
La Pata Peronista del Macrismo.
Claro que en las formas esta primera gestión al frente del Posadas, era mucho más afable que el actual entente directivo de Enrique Bertoldi Hepburn y Juan Ignacio Leonardi. En ese entonces el brazo ejecutor del vaciamiento macrista en el Posadas, se reunía con trabajadores, gremios y diversos sectores políticos prometiendo reincorporaciones, y haciendo acuerdos que luego no se cumplían.
Algunos incluso, llegaron a denominar a la gestión que tenía en Alberto Díaz Legaspe (Director Ejecutivo), Mario Palermo (Director de Asistencia Médica) y Pablo Mazza (Director de Administración Financiera) las figuras más visibles como «la gestión peronista» en clara alusión a los pasados duhaldistas y kirchnerista de Díaz Legaspe y Mazza respectivamente.
El tiempo parece ir confirmando, lo que el sentido común de los trabajadores del Posadas supo caracterizar en 2016: con un Estado en manos de Cambiemos cada vez más alineado con el neoliberalismo salvaje del FMI y prescindente de las alianzas extra partidarias que los depositaron en la Casa Rosada; de los tres hombres fuertes que supo tener el Posadas en los comienzos del macrismo gobernante, el único que resiste dentro del esquema de poder «cambiemita» es Pablo Mazza, escondido en el Hospital Municipal de Morón. Alberto Díaz Legaspe, pasó primero a ser asesor del entonces ministerio de salud de la Nación, pero – a comienzos de este año – se mostró en la Mesa de Salud del Peronismo de la Provincia de Buenos Aires, convocada por el vicepresidente provincial del PJ e intendente de Esteban Echeverría Fernando Gray (ver: «Alberto Díaz Legaspe, de Funcionario de Macri a Asesor Estrella del PJ Bonaerense»). Ahora, el que se acerca al PJ es Mario Palermo, quien el miércoles 28 expondrá en el concejo deliberante de Merlo sobre medicina fetal, en el corazón político del territorio que gobierna Gustavo Menéndez, titular del justicialismo bonaerense.
Pareciera que los tiempos políticos se aceleran, y los «acomodaticios» de siempre apuran sus pases previendo nuevos vientos.