Poder acceder a una vacante en un jardín municipal es casi imposible. Además de la falta de inversión y la nula construcción de espacios escolares nuevos, Ramiro Tagliaferro decidió suprimir los concursos públicos, sorteos que se realizaban luego de agrupar a los niños y niñas en los establecimientos educativos más cercanos a su domicilio. Ahora las familias moronenses sólo pueden inscribirse vía internet y sin explicación alguna, el Municipio publica los nombres de los privilegiados. Vaya paradoja, los hijos de los allegados, funcionarios o concejales de Cambiemos, todos consiguen vacantes. Los demás, a pagar un privado, si sus padres lo pueden hacer luego de pagar la luz, el gas, el agua, la comida y el transporte.