(Morón, 23/05) «Mientras más de 20 escuelas en el Distrito no tienen gas, la cúpula dirigencial de la Provincia de Buenos Aires (y los responsables políticos del Distrito) bajan a escondidas y rodeados de patrulleros a visitar escuelas mientras se desarrollan las jornadas institucionales»; resalta un comunicado de la seccional morón del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de la Provincia de Buenos Aires (SUTEBA) a propósito de una pretendida visita fuera de agenda de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, a la Escuela Secundaria 34 de Castelar Norte.
El Repudio de SUTEBA.
«Semana tras semana padres de diferentes comunidades educativas se presentan a reclamar en el Consejo Escolar por las condiciones deplorables en las que estudian sus hijos. La respuesta siempre es la misma: que “justo estaban por ir para allá” y que “desde el nivel Central no les facilitan recursos para resolver los problemas con celeridad;” continúa exponiendo el comunicado, que párrafo seguido agrega:»Pero luego esos responsables políticos (con Vidal y Sanchez Zinny a la cabeza) se pasean entre risas y proselitismo político por nuestras escuelas, haciendo oídos sordos no sólo a nuestros problemas laborales personales (entre ellos el mal cobro, razón por la cual estamos manifestándonos ahora mismo en La Plata) sino que también miran para otro lado frente a la emergencia edilicia en la que encuentran muchas escuelas de Morón.»
En efecto, la escuela secundaria 34 elegida por Vidal para realizar su recorrida proselitista es dirigida por la frustrada inspectora Alicia Cocciolone (ver: «Indignación de la Comunidad Educativa de la Secundaria 34…») y desde la comunidad educativa sindican que el edificio educativo «se está cayendo a pedazos» y que lo que busca el gobierno provincial es cerrarla porque «no tiene casi matrícula».
Una Movida Calculada buscándose «despegar» de Tagliaferro.
Claro está que no fue casual que la puesta en escena de Vidal se llevara a cabo justo en el momento que el que SUTEBA había movilizado al grueso de sus afiliados a la ciudad de La Plata en reclamo de mejoras laborales; ni que en su visita buscara despegarse del padre de sus hijos Ramiro Tagliaferro, ya que no invitó ni al intendente, ni a ninguno de sus funcionarios comunales ó consejeros escolares a su recorrida. En cambio fue acompañada por el Ministro de Educación Provincial Gabriel Sánchez Zinny, la inspectora Sandra Santachita y la directora de la Secundaria 34 Alicia Cocciolone: los dos primeros responsables políticos mediatos de la tragedia que terminó con las vidas de la docente Sandra Calamano y el auxiliar Rubén Rodríguez en Moreno (Santachita fue inspectora de ese distrito hasta mediados del 2018), y la última sindicada hasta por sus pares de ser el brazo ejecutor de las políticas de ajuste de la gobernadora en su efímero pero dañino paso por la inspección de escuelas secundarias en Morón.