(Haedo) En julio de este año, Ramiro Tagliaferro visitó la Escuela Primaria 8 de Haedo en la que se estaban realizando algunas refacciones; sin embargo, una vez en el edificio educativo, se topó con que la primaria en cuestión compartía el inmueble con la Escuela Secundaria 52, con importantes falencias edilicias donde «desde hace más de 2 años se vienen reclamando reformas y mejoras en el techo que se llueve, en los aires acondicionados, en la entrada de calefacción – que está anulada -, en los baños, que son de uso compartido entre la primaria y la secundaria, para tener cada uno su baño, que la secundaria viene reclamando también, además de las obras de ampliación que tuvo ya hace 4 años otorgadas, presupuesto para tener obras de infraestructura en la secundaria…» (ver: «Estudiantes de la Escuela Secundaria 52 le reclamaron a Tagliaferro por Mejoras Edilicias…). En esa oportunidad, representantes del Centro de Estudiantes de ese establecimiento de nivel medio abordaron respetuosamente al intendente, planteándole esta problemática, y dejándolo mal parado luego de que se viralizaran sendos vídeos caseros donde se lo nota titubeante al mandatario comunal.
Una Sanción Aleccionadora.
Así y todo, el punto a favor de Tagliaferro en esa oportunidad fue su impostada tolerancia al escuchar los planteos de las estudiantes y responderles con evasivas técnicas. Pero lo que en principio parecía que iba a quedar sólo en un cruce de palabras (aunque sin ninguna solución por parte del estado municipal); pasó a mayores toda vez que las autoridades distritales de nivel medio aplicaron una sanción poco clara aunque aleccionadora al docente referente de las menores que se atrevieron a incomodar al intendente macrista.
Una Sanción con Tinte de Vendetta.
Es así que el pasado jueves 22 de agosto, el profesor de historia Mariano Olano, coordinador del programa Jóvenes y Memoria por esa institución secundaria, y uno de los promotores de la organización democrática de los alumnos de la «52» en centro de estudiantes fue apartado del aula por determinación de la inspectora de nivel medio de Haedo, Fabiana Velardo (foto) . La funcionaria macrista (que además de desempeñarse como inspectora en la localidad de Haedo desde mediados de 2018, percibe un sueldo como Directora de la Escuela Vocacional – de oficios – del municipio de Morón), presentó como fundamentos de su decisión, supuestas inconductas achacadas al docente y un elevado porcentaje de desaprobaciones a su alumnado que fue desmentido por los propios estudiantes.
«La Inspectora quiso Disciplinar al Docente…»
Olano, no quiso dar declaraciones a la prensa, optando por el camino de la prudencia y supeditándose a la estrategia del SUTEBA, gremio docente del cual es delegado y que asumió su defensa. En ese sentido, el que sí accedió a dialogar con Quinto Poder Conurbano, fue el secretario general de la seccional Morón del combativo gremio, Eduardo Calvimonte quien explicó: «Lo que ocurrió con Mariano Olano es muy difícil de caracterizar en el sentido de que hay algunas cuestiones que nosotros creemos que tienen que ver con una persecución al compañero…» Y agregó: «Hay algunas situaciones poco claras… desde donde esta inspectora se tomó de eso como para justificar un desplazamiento del cargo, y poder disciplinarlo…» Y profundizó: «Estamos en desacuerdo con la medida. Nos parece que el desplazamiento no debería corresponder. Creemos que se debería llevar adelante una investigación acorde con la situación: convocar a la comunidad educativa, preguntarle a los estudiantes, a la familia, aclarar algunas cuestiones que tienen que ver con asesoramientos que no se hicieron en su debido momento».
«Es el Docente de un Grupo de Chicas Movilizadas por la Situación de las Escuelas…»
Por otra parte, lo ocurrido con el docente es considerado por el titular de SUTEBA Morón como una maniobra distractiva y manifestó en ese sentido: «Tendríamos que estar hablando de cuestiones más de peso que tienen que ver con el ajuste educativo, con la falta de inversión en capacitación, en elementos necesarios para la escuela, en las dificultades que tienen los pibes por el S.A.E. (NdR. Sistema Alimentario Escolar), y por el deterioro de las escuelas que no tienen gas; y, sin embargo, estamos instalando temas que tienen que ver con ciertos procedimientos de los inspectores en desplazar a compañeros como un mecanismo de disciplinamiento ante la impotencia de no poder resolver cuestiones de fondo». Y, desde ahí, no pudo dejar de observar la causalidad de que las alumnas que abordaron al intendente en el mes de julio «son alumnas de él y forman parte de un grupo de pibas bastante movilizadas por la situación de las escuelas.»
Los Vídeos de la Discordia.