(Morón, 18/12) Este era un debate que ya tenía fecha en el cuerpo legislativo de Morón desde que el peronismo ganó las PASO y se ratificó durante las elecciones generales: devolver el busto de Néstor Kirchner a la plaza de Morón. Por esta razón, luego de la asunción el primer gran debate del HCD tuvo como protagonista esta reparación histórica.
«No se proscribe el Amor…»
Al iniciar la discusión para derogar la ordenanza que quitó el busto, en el recinto se escuchó la voz de la presidenta del bloque del FDT, Paula Majdanski, quién reivindicó la figura del expresidente y fustigó a la anterior administración del municipio por su «revanchismo político». «No se proscribe el amor, no se remueve la lealtad, no se tira abajo a la historia», aseguró la concejal.
Las palabras de Majdanski fueron secundadas por las de un dirigente histórico de Morón, José Gayoso (foto), quién recordó que en noviembre de 2012 el HCD en audiencia pública aprobó la colocación del busto. Posteriormente detalló las instancias en las que Cambiemos voto su «remoción» en 2018, iniciativa «anticipada, fogoneada y altamente publicitada por el diario Clarín, perteneciente al multimedio que operó constantemente contra el kirchnerismo», detalló el concejal.
Asimismo, Gayoso sostuvo que el «revanchismo político» promovido por el macrismo a nivel nacional «también se instaló en Morón quebrantando el estado derecho y violando todas las normas y procedimientos», coyuntura en el cual se removió el busto y se socavó física y simbólicamente la figura de Néstor Kirchner, «manera en la que los concejales de Cambiemos decidieron profundizar la brecha y la división entre los argentinos», añadió.
Entre los cánticos del publico asistente a la sesión extraordinaria se escuchó corear en reiteradas ocasiones: «Néstor no se murió, Néstor no se murió, Néstor vive en el pueblo…», y esa impronta se hizo presente en cada una de las intervenciones de los y las concejales del FDT, entre las que destacaron las de Majdanski, Gayoso, Gabriel Barquero y Julieta Laviuzza, entre otras.
Las Chicanas del Macrismo.
Por su parte, el bloque de Cambiemos no dudó en descalificar la figura del expresidente y afirmar sin fundamento ni base legal alguna que fue «el mandatario más corrupto de la historia argentina», como es el caso del concejal Emiliano Catena, un experto provocador al igual que su compañero de bancada Leandro Ugartemendía que ante la presión del público en el recinto se dio media vuelta, miró a la gente y disparó: «Volvieron, si, volvieron, pero peores que antes».
En una clara actitud enajenada por el triunfo electoral del kirchnerismo, Catena y Ugartemendía desplegaron un discurso agresivo y cargado con una fuerte dosis de odio, a lo que el público les gritó «gorila», «neoliberal» e hicieron responsables a ellos y a la alianza política a la que pertenecen de la actual crisis económica y social por la que atraviesa la Argentina, situación a la que el actual gobernador de la provincia, Axel Kicillof, definió de manera contundente como de «tierra arrasada».