¡ Qué culiados! ¡No llamaron al paro!: Entrevista a Pablo Carro, líder sindical cordobés
Carro (Foto) es secretario general del gremio de los docentes universitarios de la UNC y Secretario General de la CTA. Desde que asumió el gobierno de Macri ha estado en luchas diversas confluyendo con otras centrales comprometido con la unidad, trabajando en la calle.
*Por Valeria Brusco
¿Cuál es tu balance de la jornada?
Al final del día, la foto del 7 M es contrastante. Por un lado, la impresionante movilización de los trabajadores por abajo; por otro, el triunvirato de la CGT que desaira otra vez el capital acumulado por la pelea contra el ajuste en la base. Los trabajadores esperábamos la fecha para el paro nacional. Y genera bronca porque muchos buenos compañeros de la CGT venían laburando duro para sacar un paro unificado y el triunvirato les dio la espalda.
Una gran movilización múltiple y variada, acompañada por todas las centrales sindicales, se agotó en el trío los panchos cantando boleros. Muchas voces potentes dentro del movimiento obrero fueron silenciadas. La CGT Nacional desaprovecha otra oportunidad para expresar el clamor popular. El gobierno de Macri quiere llevarnos otra vez a los 90, y parte de la dirigencia sindical comienza a parecerse a los “colaboracionistas” que enfrentaron Ongaro y Tosco.
¿Queda un sabor amargo?
De ninguna manera. Hay que ver el panorama completo y mirar al conjunto. Y el conjunto es mucho pero mucho más amplio que la cúpula sindical de la CGT. Hay una intensa pelea contra el ajuste en todo el país y hay muchos buenos dirigentes sindicales al frente de esa pelea. Y esa pelea tiene mucho acompañamiento social, aunque todo esto sea invisibilizado por los grandes medios. Creo que las movilizaciones del 6, 7 y 8 de marzo serán un parteaguas de la Argentina que sigue. Pronto se verán las consecuencias.
¿El paro educativo, la movilización de la CGT y el paro de mujeres son parte de una misma pelea?
Sin dudas. Las mujeres son las primeras en pagar el ajuste en una situación de desigualdad estructural que persiste. Reciben menores salarios, son relegadas a la hora de los ascensos y muchas veces son acosadas por los superiores en los lugares de trabajo. Además, bancan la familia como lo hacen muy pocos hombres. En Córdoba se formó un frente intersindical de mujeres que puso blanco sobre negro cuáles son sus reivindicaciones, lo que todos debemos defender. Será otra manifestación contra el ajuste porque también fueron recortados los fondos destinados para abordar la problemática específica.
¿Cómo sigue la pelea docente?
Con asambleas de base para organizar una pelea dura pero justa. El gobierno nacional tiene que cumplir la ley y convocar a la paritaria nacional docente. Es lo que corresponde. Y ahí, en ese ámbito, discutir el piso salarial nacional. Y si lo que se quiere es discutir cambios en la educación, ese el lugar por excelencia. Macri prometió jerarquizar la labor docente y mejorar los salarios. Pero lo único que hay es estigmatización y ninguneo. Pero se equivoca. Los argentinos de a pié sabemos bien lo que significa la educación pública para las aspiraciones ascendentes de nuestro pueblo. Los maestros, los docentes, los científicos sabemos bien lo mucho que mejoramos durante el kirchnerismo y vamos a defender la educación como un derecho de todos. Y la sociedad acompaña y la resistencia será dura. No vamos a aflojar.
Se vienen las elecciones de medio término, ¿qué pensás?
Sin resistencia social no hay alternativa electoral. Primero hay que enfrentar el ajuste en la calle. Hay que construir un plan de lucha que se proponga un cambio en el rumbo de la política económica del gobierno nacional. Con un programa popular que impulsen los trabajadores. Luego, la clave estará en construir una alternativa electoral que no se proponga volver a un pasado idílico inexistente sino en lograr la confluencia programática de los distintos sectores perjudicados por el plan de negocios de Macri. Se trata de reconocernos como argentinos que queremos cambiar y mejorar pero a favor y no en contra del pueblo. Hay que reconstruir una conciencia crítica colectiva y una participación ciudadana comprometida con los asuntos públicos. Recrear una fuerza popular y democrática que motorice, a su vez, un despliegue electoral que represente genuinamente los intereses de las mayorías sociales.
*Valeria Brusco es Licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad Católica de Córdoba y Doctoranda en Ciencia Política por la Universidad Nacional de San Martín. Es profesora de Metodología de la Investigación Cuantitativa y de Sociología de las Organizaciones en la Facultad de Ciencia Política y RRII de la UCC. También es profesora en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Córdoba. Su área de investigación principal es la organización política, los partidos políticos, sus miembros y dinámicas en las democracias nuevas. Las organizaciones culturales que se vinculan con políticas públicas es una línea en desarrollo así como los temas vinculados a la desigualdad y políticas públicas. Ha publicado trabajos en las revistas Desarrollo Económico y Latin American Research Review y es coautora de un libro editado por Cambridge University Pres llamado Voters, Brokers and Clientelism junto con Susan Stokes, Thad Dunning y Marcelo Nazareno.